Usando los materiales adecuados, el vehículo quedará muy bien protegido frente a eventuales amenazas. Conoce más sobre cómo funciona el blindaje de los vehículos.
El blindaje de un automóvil está compuesto por varios elementos balísticos para garantizar la protección total de quien está dentro del vehículo. De esta forma, saber cómo funciona el blindaje de vehículos ayuda bastante a la hora de elegir la protección ideal para cada tipo de vehículo y durante una situación de riesgo para saber cómo reaccionar.
Antes de buscar una empresa de blindaje para un vehículo, es importante saber cuáles son los materiales usados en cada parte. Para hablar de eso, cabe destacar que todo el habitáculo del vehículo (parte interior en la que viajan los pasajeros) debe ser blindado, o sea, ninguna parte debe quedar desprotegida o con algún tipo de espacios descubiertos conocidos como huecos balísticos. Estos son algunos de los principales materiales utilizados en cada una de las partes de los vehículos:
Para tener los vidrios blindados y resistentes, se utiliza el material de policarbonato. Este producto garantiza la seguridad para los integrantes del vehículo y cuenta con una tecnología que evita que las astillas de los vidrios pasen al interior del habitáculo dañando a los pasajeros de los vehículos.
El objetivo del blindaje de los vidrios del vehículo es mantener la apariencia más parecida posible a la original. La gran diferencia – y ventaja – del vidrio blindado, es su grosor.
El blindaje en los vidrios funciona de la siguiente forma:
La capa externa del vidrio es la primera protección. El impacto de una bala se asemeja a la fuerza de un taladro y cuando el proyectil alcanza la pieza con alta rotación y velocidad es corroído y deformado gracias la naturaleza abrasiva del material del vidrio;
La segunda capa amortigua el impacto. Formada por resina o plástico, reduce la fuerza de la bala hasta pararla;
La última capa de vidrio por lo general nunca es alcanzada por la bala. Sin embargo, el vidrio o la capa de vidrio de esta última parte se puede astillar por la propagación de la energía ocasionada por el impacto. Por esa razón, en el blindaje de los vidrios la última capa termina en una fina película plástica, que detiene las astillas e impide que lastimen a alguien dentro del vehículo.
Como ya fue mencionado, todas las partes del vehículo deben ser protegidas y revestidas. Para lugares como manijas y cerraduras se usa el acero balístico. Por eso, ese material es esencial para un blindaje correcto y seguro.
Antes, el acero balístico era empleado en el revestimiento opaco total del automóvil (todo lo que no son vidrios), pero un nuevo material fue desarrollado, que ofrece la seguridad en la misma proporción, pero con un diferencial importante: es mucho más liviano.
Normalmente la placa de acero balístico contiene níquel, molibdeno y pequeñas cantidades de azufre. El producto fue desarrollado, inicialmente, para la protección de vehículos blindados en operaciones militares.
El material más utilizado para revestir el blindaje opaco en vehículos blindados de niveles medios, son los paneles de aramida Kevlar®. Este material es un tejido muy resistente y maleable que permite la instalación en todas las partes opacas del vehículo (todo lo que no es vidrio).
Las mantas de aramida de Kevlar® son fuertes y resistentes y son utilizadas en chalecos a prueba de balas, vehículos militares y civiles.
Las fibras de aramida Kevlar® son una clase de fibras sintéticas resistentes al calor, además de ser livianas comparadas con otros materiales usados en el blindaje. Además de blindajes balísticos, son empleadas en aplicaciones aeroespaciales y militares, en neumáticos de bicicleta, cordeles marinos, refuerzo de cascos marinos, entre otros.
Los vehículos blindados están completamente protegidos después de haber pasado por el blindaje. Con el material instalado en los vidrios, chapas, manijas y paredes de fuego, todos los integrantes del vehículo estarán seguros.