Varias son las formas de prevenir a los trabajadores de la construcción civil contra posibles accidentes, pero una que es infalible es el mapa de riesgos.
El mapa, que surgió en Europa en 1960, es un señalizador de riesgos que pueden ser encontrados en la planta de una obra. Este muestra en colores los diferentes tipos de accidentes que pueden ocurrir si no hay una debida precaución.
Al final, ¿Cuáles son los elementos necesarios para tener como base para crear un mapa de riesgos? Vamos a ellos:
Tomando estas directrices como base, existen colores que pueden alertar a los trabajadores sobre el tipo de accidente que puede ocurrir en caso de que no se tomen las debidas precauciones. Y también el tamaño de las bolitas coloridas determina el tipo de gravedad.
En el mapa de riesgos son puestas señalizaciones en los diferentes sectores de un layout de la obra para identificar el tipo de riesgo que la persona corre en el local determinado.
Como en el siguiente ejemplo:
Cada color tiene una razón de estar en el mapa y, por eso, te presentamos lo que cada una de ellas significa.
Vamos a ellas:
Verde – riesgos físicos como frío, calor, humedad etc;
Rojo – riesgos químicos como polvo tóxico, compuestos químicos en general;
Marrón – riesgos biológicos como bacterias, hongos, virus y otros peligros similares;
Amarillo – riesgos ergonómicos que involucran largas jornadas de trabajo, ritmo intenso, y transporte manual de peso, entre otros;
Azul – riesgos de accidentes debido a equipos desprotegidos, posibilidad de incendios e iluminación precaria, entre otros.
Ahora que estás más enterado sobre el mapa de riesgos, ¿Cuál es el color que tu obra más presenta? ¡Cuéntanos en los comentarios!